Testimonio de Marta, paciente sometida a radioterapia ultra hipofraccionada en el Hospital Beata María Ana de Hermanas Hospitalarias

Testimonio de Marta, paciente sometida a radioterapia ultra hipofraccionada en el Hospital Beata María Ana de Hermanas Hospitalarias

  • Más de 200 pacientes con cáncer de mama del Hospital Beata María Ana han sido tratadas de manera exitosa en 5 sesiones con radioterapia ultra hipofraccionada.
  • Esta nueva técnica, la radioterapia ultra hipofraccionada, se ha incluido dentro de los protocolos terapéuticos del centro y permite tratar a este grupo de pacientes con cáncer de mama en 5 sesiones en lugar de en 25.

Marta es una de estas pacientes. Se encuentra hoy bien, algo cansada por el desgaste de todo este año, como ella misma nos cuenta, pero mucho mejor de lo que ella creía que iba a estar en un principio.

En julio de 2022, en una revisión anual en la Fundación Tejerina – Centro de patología de mama -, a Marta le detectan un carcinoma intraductal, con buen pronóstico y bien localizado.

A partir de ahí, todo fue muy rápido. Tanto es así que en pocos días, el 4 de agosto, entra en quirófano para someterse a la cirugía para su tratamiento. Todo fue bien.

‘Me pareció ciencia ficción’

Su oncólogo le cita en septiembre para hacerle seguimiento, preguntarle por su estado y explicarle los resultados de la anatomía patológica y del proceso a seguir a partir de ese momento. Debía someterse a un tratamiento con radioterapia ultra hipofraccionada, para el cual debía ser derivada al Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Beata María Ana (Instituto de Técnicas Avanzadas contra el Cáncer – iTAcC).

“Cuando me dijeron el nombre y en qué consistía, reconozco que me pareció ciencia ficción. Yo ya me había informado de la radioterapia pero esto era otra cosa. Estaba sorprendida. Pero luego me lo explicaron todo tan bien e hicimos pruebas, que ese mismo día ya fijamos la fecha para iniciar el tratamiento. 5 días, del 12 al 17 de septiembre”.

‘Me he sentido muy acompañada’

Marta nos cuenta que todo ha sido más fácil y llevadero gracias a la empatía de todo el personal del Hospital y a la comunicación fluida con todos y, en especial, con su oncóloga radioterápica, la Dra. Marta Rodríguez. “En una situación así, de total incertidumbre y de miedo, se agradece que haya una comunicación constante y que te informen. La información tranquiliza…”, nos cuenta.

Ella quiere insistir en ello, en el apoyo y ayuda que ha recibido de todo el personal durante todo el proceso que no ha terminado. Una revisión al mes para hacer seguimiento, ver cómo estaba el pecho y si tenía algún síntoma extraño… “Está todo muy pautado y controlado”. Tanto es así que con la Dra. Rodríguez tendrá una revisión cada 3 meses, y con el Dr. Rodrigo García Alejo, jefe del equipo de iTAcC del Hospital Beata María Ana, cada 6. Y a ella no le pesa. Confía y espera.

Le doy un 10 a todo el personal. Siempre están tan pendiente de que estés bien, de minimizar los efectos que tengas y de informarte de todo, que me he sentido muy acompañada”, concluye.